Santander prepara un masivo plan de movilidad a nivel nacional con traslados de hasta 100 kilómetros

Banco Santander prepara traslados masivos para gran parte de sus empleados, que podrían ver como su nuevo centro de trabajo podría estar hasta a 100 kilómetros del actual. La pretensión de la entidad pasa por firmar con los principales sindicatos un acuerdo de movilidad por el cual un empleado de la entidad que trabaje en Andalucía podría ser trasladado, incluso, a Ceuta o Melilla.

Según fuentes conocedoras de las negociaciones, los principales sindicatos de la entidad –CCOO, UGT, FITC y STS- firmarán un acuerdo en los próximos días por el cual, a cambio de una compensación económica fija, el trabajador desplazado podría trabajar hasta a 100 kilómetros de distancia de su puesto original. Con este acuerdo, si una oficina cierra se podría trasladar a los empleados a dicha distancia; pero es que si se encuentra, por ejemplo, en Canarias o Baleares, podría haber traslados entre islas y, si la oficina que cierra está en Andalucía, el destino del trabajador podría ser Ceuta o Melilla.

En definitiva, la firma de este acuerdo no dejaría de ser una prolongación del texto firmado en el ERE de 2016, que mantenía estas mismas condiciones. Fuentes sindicales explican que, si bien es cierto que dentro de un proceso de Expediente de Regulación de Empleo se puede llegar a comprender este tipo de traslados, no sucede lo mismo ahora ya que, según el propio banco, no están previstas más bajas, además de las 200 anuales que se producen de media debido a otros factores, como bajo rendimiento.

Juan José Paredes, Secretario General de la CGT en Banco Santander, ha explicado a OKDIARIO que “aunque normalmente paguen a los trasladados unos 2.000 euros por el mero hecho de ser desplazados, un pago único de ese tipo no compensa”. De hecho, Paredes explica que este acuerdo “se usó como una invitación a abandonar el Banco a compañeros que no podían aceptar el traslado, porque les implicaba desbaratar su vida”, otros, que sí querían mantener el empleo “no tuvieron más remedio que aceptar”.

Desde el sindicato no ven sentido a este acuerdo, porque según se anuncia en las comisiones de empleo, la plantilla está ajustada y tampoco tienen previsto cierres a corto plazo, así que “¿a qué viene este interés? Y lo que menos entendemos es: ¿qué sacan CCOO y UGT con esta nueva agresión a sus compañeros? No es sólo que consientan, es que ellos son los promotores de esta idea, que por supuesto, ha tenido una estupenda acogida en el banco”.